Cuenca urbe única por su trazado urbanístico como un tablero de ajedrez. Ciudad que está hecha de barro, hierro forjado de madera, de una arquitectura singular, razón por la que hace 18 años fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad de la Unesco.

El Alcalde Marcelo Cabrera vela por ese patrimonio, por sus casonas que guardan una riqueza histórica, cerca de siete millones de dólares se destina al año para preservar el patrimonio.

Se han restaurado casonas como:

Casa Jesús Arriaga: Es una construcción de dos plantas. Tiene cimientos de piedra, paredes de adobe en la primera planta y de bahareque en la segunda. Todo el cielo raso, al igual que los aleros, son de carrizo y barro (enchacleado) y cuenta con una cubierta de teja artesanal.

Centro Múltiple: La casa está ubicada frente al portal de la iglesia de El Cenáculo y ha sido rebautizada como Centro Múltiple Municipal, esto debido a que en el lugar se prestarán servicios de salud y se instalarán oficinas administrativas del gobierno local.

Con sumo cuidado 12 restauradores buscaron en las paredes de esta casa patrimonial de 1917 restos de los murales del artista Nicolás Vivar, considerados un tesoro arquitectónico.

Pasaje León:fue edificado en 1930 en el Centro Histórico de Cuenca, puede ser considerado como el primer centro comercial de la ciudad. La casona patrimonial, que estuvo abandonada durante ocho años, fue recuperada en una intervención que duró 11 meses y finalizó en junio pasado. La intención del Municipio, su actual dueño, es reactivar su uso comercial y destinar los 28 locales para los artesanos otavaleños que laboran en la aledaña plaza de San Francisco.

En la actualidad desde el GAD Municipal de Cuenca se está trabajando en la recuperación: Casa Lira, Casa Palacios Abad, Casa Maricorylé, Iglesia San Blas, Vitrales San Alfonso, entre otras.