VOXLOCALIS #106

ACTUALIDAD

Por Liliana Alejandra Ladrón de Guevara Muñoz. DIRCOM de la Unión Iberoamericana de Municipalistas y coordinadora de la Red Iberoamericana de Profesionales por la Comunicación Pública - IberComp.

 

La esencia del municipalismo consiste en la protección y cuidado de las personas pisando en el sitio en que ocurren los problemas y donde también suceden los momentos que marcan a las comunidades positivamente y merecen ser comunicados = compartidos para generar pertenencia e involucramiento entre ciudadanía y entidades públicas en una retroalimentación virtuosa.

 

El filósofo y escritor Humberto Maturana, señalaba que "En el conversar construimos nuestra realidad con el otro” y agregaba “No es una cosa abstracta. El conversar es un modo particular de vivir juntos en coordinaciones del hacer y el emocionar”.

Esa potente frase del gran pensador chileno, sin duda se constituye en pilar fundamental de lo que buscamos desde el quehacer de la Comunicación Pública y que el mismo Maturana fortalece al indicar “Por eso el conversar es constructor de realidades. Al operar en el lenguaje cambia nuestra fisiología. Por eso nos podemos herir o acariciar con las palabras”.

Al hilo de lo anterior y en el contexto actual, la gestión de la comunicación de gobierno o Comunicación Pública tiene un rol  fundamental en la construcción de administraciones públicas empáticas, cercanas y eficaces, centradas en el diálogo que propicia la acción y posibilita el consenso al interior de las administración públicas. De este modo coordinadamente los gobiernos asisten a la comunidad, permitiendo a avanzar en equipo, uniendo a la ciudadanía con la gestión de sus representantes.

El municipalismo, entendido como una forma de gobernanza basada en la proximidad, encuentra en la comunicación un vehículo clave para fortalecer este vínculo entre la personas e instituciones.

La profesora especialista en la materia de la Universidad de Alicante Conchi Campillo, señala que “La administración relacional se basa fundamentalmente en asumir cuáles son los nuevos roles que pueden desempeñar las asociaciones y colectivos locales en la gestión de lo público. Así, la interacción con el tejido social representa el vínculo a través del cual la ciudadanía pasa a formar parte activa de la organización municipal”.

Es por tanto que en la búsqueda de nuevas formas de interacción entre ciudadanía y gobiernos locales, la comunicación pública bien gestionada permite a los gobiernos municipales no solo informar, sino también generar retroalimentación y conocer el sentir de las comunidades, mientras suma la inteligencia colectiva y el conocimiento que las personas tienen por el simple hecho de vivir en un contexto donde ocurren conversaciones en diferentes vías que pueden actuar como termómetro social y que deben ser rentabilizadas como corresponsabilidad social por las administraciones y autoridades.

En la actualidad ya debemos dar por sustentada la idea de que la comunicación pública es un servicio público, basado en el intercambio de información entre el gobierno y la ciudadanía. Su objetivo es fortalecer la gobernabilidad para avanzar a la gobernanza, mientras a la par robustece la democracia participativa.

Desde hace más de diez años defino Comunicación Pública como “El conjunto de acciones y herramientas comunicacionales disponibles en las administraciones del Estado para vincularse a la ciudadanía en un ejercicio circular de retroalimentación multidireccional y permanente, que busca el intercambio y el trabajo cooperante y cocreativo”.[1]

Y siempre enfatizo que, aunque las instituciones públicas y privadas comparten en el tema de la comunicación varias de sus estrategias, herramientas y usos, no podemos olvidar que el fin que persiguen los gobiernos, en su diferente nivel de incidencia -local, regional o nacional- es diferente lo que “mueve” a las empresas.

En lo público debe primar la búsqueda del bien común y por sobre la rentabilidad económica se persigue el beneficio social de las personas.

Para alcanzar el objetivo antes descrito y avanzar a la equidad, cohesión e igualdad dentro de los territorios, la comunicación municipal debe trascender el mero acto de informar sobre actos de gobierno. Su objetivo debe ser generar espacios de interacción, donde las voces de la comunidad se integren en la toma de decisiones.

Los municipios y sus representantes, deben comprender que la ciudadanía no es un ente pasivo que recibe información, sino un actor clave en la definición de políticas públicas locales. En este sentido, los municipios que priorizan la comunicación como una estrategia de gestión pública, deben fomentar la construcción de confianza a través del ejercicio de la transparencia, elementos esenciales para fortalecer la democracia local.

No podemos obviar que, en la actualidad, la digitalización y las nuevas tecnologías han transformado la manera en que se comunican los municipios con la ciudadanía. Los gobiernos locales y la administración pública en general han sumado como medio de interacción plataformas digitales, redes sociales y herramientas que posibilitan una comunicación más ágil y accesible. En ese sentido debiéramos avanzar en la inmediatez, transparencia y retroalimentación, sin embargo, el reto sigue siendo garantizar que estas herramientas no sean solo canales de difusión unidireccional, sino espacios de diálogo auténtico, donde las preocupaciones de la ciudadanía sean escuchadas y respondidas.

En este proceso, la comunicación debe ir de la mano con la empatía y la sensibilidad social. La proximidad física que caracteriza al municipalismo debe reflejarse en una comunicación cercana, clara y honesta. La ciudadanía espera gobiernos que hablen con transparencia, que expliquen decisiones, que escuchen activamente y que respondan con acciones concretas a las problemáticas locales. La comunicación pública municipal es, en última instancia, un reflejo del compromiso de los gobiernos locales con su gente y de sus autoridades con las personas.

Los gobiernos municipales que comprenden la importancia de la comunicación pública fortalecen la cohesión social y construyen comunidades más resilientes. La gestión de la información y la capacidad de escucha activa son aspectos que definen la calidad de la relación entre el gobierno local y la ciudadanía. Por ello, la profesionalización de la comunicación en el ámbito municipal no es una opción, sino una necesidad para la consolidación de una gobernanza democrática y efectiva.

En el marco de sistemas democráticos, el rol de la comunicación de las administraciones gubernamentales y públicas es fundamental. La Comunicación Pública es un derecho humano, que no sólo debe ser respetado y garantizado por los gobiernos en todos sus niveles, sino que debe emplearse como herramienta estratégica para el desarrollo integral de los territorios.

 

Liliana Ladrón de Guevara Muñoz

 

https://compolitica.com/wp-content/uploads/2020/04/N48_Eta.2_La_revista_de_ACOP_Abril2020-G.pdf

 

[1]Liliana Ladrón de Guevara Muñoz (2020). Periodista especialista en Comunicación Pública. QUÉ ES LA COMUNICACIÓN PÚBLICA? COCREANDO DEMOCRÁTICAMENTE DESDE LA ADMINISTRACIÓN Y CON LA CIUDADANÍA.

Serie Síntesis Nº 55. Unión Iberoamericana de Municipalistas.

 

 

 

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Liliana Alejandra Ladrón de Guevara Muñoz  (   Chile )

Periodista chilena radicada en España - Especialista en Comunicación Pública - Directora de la Revista Vox Locális.