Fuenlabrada es un municipio español ubicado en el suroreste de la Comunidad de Madrid, cuya población supera actualmente los 190.000 habitantes. Forma parte del área metropolitana de la capital de España, de cuyo centro se encuentra a una distancia aproximada de diecisiete kilómetros.

Su fundación data del siglo XIV y se mantuvo como pequeña localidad rural hasta la década de 1970, en la que empezaría a experimentar un rápido crecimiento de población como consecuencia de los intensos flujos migratorios internos del campo a la ciudad que se experimentaron en aquellos años y que dieron lugar a nuevas ciudades alrededor de los grandes núcleos históricos industrializados: Madrid, Barcelona, Bilbao, etc.

Muchas familias llegaron a Fuenlabrada desde Extremadura, Andalucía y otras zonas rurales empobrecidas del Estado español con la esperanza y el proyecto de encontrar empleo, mejorar sus condiciones de vida y ofrecer oportunidades de futuro a sus descendientes. Uno de los grandes retos que tuvieron que afrontar fue, además, transformar una “ciudad-dormitorio” en la ciudad que es hoy, un espacio de convivencia en la diversidad, dotado de una amplia variedad de recursos públicos que contribuyen a la igualdad, libertad y bienestar del conjunto de su población, con especial sensibilidad hacia sus sectores más vulnerables.

En 1979 tuvieron lugar las primeras elecciones municipales del actual periodo democrático en España tras la dictadura franquista. Desde entonces, los sucesivos gobiernos locales de Fuenlabrada han demostrado un elevado nivel de compromiso con los derechos y el bienestar de la infancia y la adolescencia y del conjunto de la ciudadanía.

Los nuevos consistorios democráticos de ciudades como Fuenlabrada debieron asumir el enorme reto de mejorar las condiciones de vida de la población trabajadora en un contexto de importantes déficits a nivel de vivienda, transporte público, urbanismo, servicios educativos y sanitarios, educación y sanidad, oferta cultural, etc. Sin embargo, a lo largo de los años 80 y 90 experimentaron profundas transformaciones que beneficiaron transversalmente a los distintos grupos de población. Niños, niñas, adolescentes y jóvenes pudieron disfrutar de centros educativos, instalaciones deportivas, oferta cultural y de ocio, espacios verdes, viviendas dignas y servicios municipales de diverso tipo que antes no existían.

La Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Convención sobre los Derechos del Niño en el año 1989; desde entonces se habla de políticas locales de infancia y adolescencia basadas en un enfoque de derechos. Sin embargo, no hay que olvidar que, antes de la Convención, los gobiernos municipales de Fuenlabrada, así como de otras muchas ciudades de España, tenían ya muy en cuenta los derechos recogidos en la Constitución de 1978 como fundamento de las nuevas políticas públicas de ámbito local.

Y no solo eso, sino que el municipalismo y una parte importante del tejido asociativo civil fueron en sí mismos, durante muchos años, fuerzas transformadora de las ciudades, teniendo como referencias la Declaración Universal de los Derechos Humanos, la propia Constitución y los nuevos Estatutos de Autonomía de sus regiones. Sin duda la Convención sobre los Derechos del Niño fue una excelente noticia que contribuyó a reforzar un enfoque de derechos sobre el que ya se venía trabajando desde hacía más de una década.

Sin embargo la Convención aportaría otras novedades también muy positivas para el avance de las políticas locales de infancia y adolescencia. La más importante quizás consistió en ir más allá de la consideración de este sector de población como objeto de protección y destinatario de recursos, para potenciar además su visibilidad y protagonismo comosujeto político, con derechos de ciudadanía y capacidad para expresar sus intereses y plantear mejoras para su propia vida y para el conjunto de la sociedad, siempre teniendo en cuenta, como es obvio, su desarrollo madurativo.

Algunos ayuntamientos comprendieron esto rápidamente, entre ellos el de Fuenlabrada, uniéndose al pequeño grupo de municipios que en la década de los 90 acogió con entusiasmo el articulado de la Convención y se inspiró en iniciativas pioneras como el proyecto “La ciudad de los niños” (la città dei bambini), liderado por el pedagogo italiano Francesco Tonucci cuya puesta en marcha tuvo lugar en Fano, su ciudad natal, en 1991, para después extenderse a otras ciudades de Italia, España e Iberoamérica.

De aquellos años data una experiencia de coordinación municipal muy importante en el contexto de la época, en la que el Ayuntamiento de Fuenlabrada también desempeñó un papel dinamizador, se trata de la creación de un consorcio formado por cerca de una veintena de ayuntamientos denominadoRed Local de Derechos de la Infancia y la Adolescenciael cual, años más tarde, se refundaría en la plataforma que hoy se conoce como RIA (Red de Infancia y Adolescencia).

Otro momento importante en el desarrollo de la política local de infancia y adolescencia de Fuenlabrada fue en los primeros años del nuevo siglo, a raíz de que UNICEF España pusiera en marcha el Programa Ciudades Amigas de la Infancia con el fin de apoyar a los gobiernos locales en la tarea de impulsar políticas en este ámbito basadas en la Convención.

Fuenlabrada, junto con otros ayuntamientos y la propia Red Local de Derechos de la Infancia y la Adolescencia, convergió desde el principio con esta iniciativa, colaborando en su desarrollo; y tuvo el privilegio de contar con el reconocimiento de UNICEF como Ciudad Amiga de la Infancia prácticamente desde el año 2004, renovándolo de manera continuada hasta la actualidad, con el añadido de que Fuenlabrada mantiene su compromiso con la Red de Infancia y Adolescencia, de hecho, actualmente forma parte de su comisión de seguimiento junto con los ayuntamientos de Coslada (Madrid) y Daimiel (Ciudad Real).

Con datos de 2023, en Fuenlabrada la población entre 0 y 17 años es de aproximadamente 38.000 personas, lo cual viene a representar el 20% de la población del municipio. Municipios receptores de población migrante como este han tenido históricamente elevados porcentajes de población infantil y adolescente pero, como sucede en el conjunto de España y de los países de la Unión Europea, en la actualidad acusa una tendencia clara al envejecimiento de la población.

Con todo, niños, niñas y adolescentes siguen estando en el centro de las políticas municipales, a pesar incluso de los graves efectos que la crisis económica 2008 y 2013 tuvo en nuestro país entre los años 2008 y 2013, la cual motivó que muchas políticas públicas locales sufrieran severos recortes. Sin embargo, Fuenlabrada siempre ha tenido presente que es precisamente en las épocas de crisis cuando más deben reforzarse las políticas de protección social.

La participación infantil y adolescente es un componente central de este tipo de políticas. La manera de gobernar en Fuenlabrada concede una gran importancia al diálogo constante con los distintos sectores de la población, con el fin de conocer y dar respuesta a sus necesidades persiguiendo el mayor consenso posible e implicando a la ciudadanía en la búsqueda de soluciones. Esto también ocurre con los niños, niñas y adolescentes, que cuentan con elConsejo Local de Participación de Infancia y Adolescencia de Fuenlabradacomo cauce estable y eficaz a través del cual hacer oír su voz en la gestión municipal.

El municipio dispone también de un instrumento que orienta y ordena las actuaciones que el Ayuntamiento dirige a la población menor de 18 años: el V Plan Local de Infancia y Adolescencia de Fuenlabrada (2022-2025); un plan integral y transversal elaborado de manera participativa con aportaciones de niños, niñas y adolescentes y de distintos sectores de la población. En este tipo de políticas es muy importante que haya continuidad a largo plazo, por eso el V PLIA recoge, actualiza y potencia los contenidos del IV PLIA, aplicado durante el periodo 2017-2021.

El proceso de elaboración de estos planes parte de un diagnóstico de la situación de la infancia y la adolescencia de la localidad. Se elabora con datos extraídos de distintas fuentes (censos, estadísticas, informes…) e información aportada por distintos colectivos (niños, niñas y adolescentes, personal técnico municipal, grupos políticos, familias, profesionales de la educación y de la sanidad, policía, representantes de entidades asociativas, etc.). El diagnóstico sirve para destacar y caracterizar temas y aspectos de la realidad relevantes sobre los que proyectar las actuaciones del Ayuntamiento.

Del diagnóstico se extraen conclusiones que ayudan a diseñar el PLIA. De cara al periodo 2022-2025 el Ayuntamiento se ha propuesto extender la participación infantil y adolescente, reforzar las medidas de protección social, con especial atención al bienestar emocional y la prevención de la salud mental como consecuencia de los efectos de la pandemia de la Covid-19, fortalecer la coordinación interna y externa de las actuaciones municipales y mejorar el seguimiento y evaluación continua del PLIA.

El V PLIA de Fuenlabrada (2022-2025) incluye, de partida, 253 medidas de actuación organizadas en 15 áreas temáticas y 63 líneas estratégicas, pero está abierto a que en su desarrollo se incluyan modifiquen las medidas según necesidad o se incluyen otras nuevas, como no puede ser de otro modo en un tipo de planificación que necesita ser flexible para adaptarse a los cambios y para integrar dinámicamente las aportaciones de la ciudadanía.

La estructura temática del PLIA intenta abarcar en 360º todos aquellos aspectos críticos que afectan al bienestar y desarrollo de la infancia y la adolescencia: participación, ocio y tiempo libre, educación, cultura, deporte, salud, familia y protección social, igualdad, respeto a la diversidad, medioambiente, urbanismo, seguridad ciudadana, etc. En todo ello se han tenido en cuenta la Convención sobre los Derechos del Niño y los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Todo el Ayuntamiento está implicado en el diseño y desarrollo del PLIA, de modo que cada una de las quince concejalías que intervienen aporta y lidera las medidas de actuación que se encuentran en su ámbito competencial. La coordinación del PLIA corresponde a la Concejalía de Juventud e Infancia, por delegación de Alcaldía e integrada, a su vez, en el Área de Gobierno “Ciudad Viva”. Como instrumento de coordinación se dispone también de un órgano interno, la Mesa Técnica Interconcejalías.

Una singularidad del Ayuntamiento de Fuenlabrada es que para el desarrollo de su política local de infancia y adolescencia ha creado una empresa municipal, ANIMAJOVEN S.A., vinculada a la Concejalía de Juventud e Infancia, fórmula de gestión que ha demostrado ser muy eficaz para impulsar, coordinar y asegurar la calidad de una amplia variedad de programas y servicios.

Otro aspecto destacable es que el presupuesto que el Ayuntamiento de Fuenlabrada destina a este tipo de actuaciones se encuentra, posiblemente, entre los más elevados de España para municipios de tamaño similar. Sólo el presupuesto anual de la Concejalía de Juventud e Infancia, dejando a un lado lo que gestionan otras concejalías, está próximo a los 2,5 millones de euros.

Por todo ello, Fuenlabrada ha renovado en diciembre de 2023 elreconocimientocomo Ciudad Amiga de la Infancia otorgado por UNICEF España, comprometiéndose con esta organización a compartir periódicamente información sobre el desarrollo del PLIA y de su política de infancia y adolescencia en general, así como a gestionar esta política de forma transparente y participativa. Formar parte de esta iniciativa y contar con el apoyo de UNICEF es un valor añadido que aporta solidez y confianza a nuestro compromiso con la infancia y la adolescencia y sus derechos.

Enlaces recomendados:

• Ayuntamiento de Fuenlabrada https://www.ayto-fuenlabrada.es/
• Concejalía de Juventud e Infancia de Fuenlabrada https://juventudfuenla.com/
• Animajoven, S.A. https://www.ayto-fuenlabrada.es/animajoven
• Ciudades Amigas de la Infancia – UNICEF España https://ciudadesamigas.org/
• RIA (Red de Infancia y Adolescencia) https://sites.google.com/site/reddeinfanciaria/